Cuando la fe incomoda al poder: mensaje del papa León XIV a los inmigrantes
En un contexto donde se ha demonizado a los inmigrantes en EE. UU. y en Europa, el mensaje de la iglesia Católica es evidente: la fe auténtica no se usa para justificar exclusiones.

Sofía cruzó el desierto con su hijo dormido sobre el pecho. En el camino, escuchó por la radio las palabras del papa Leo XIV: “No cerremos el corazón ni las fronteras.”
Sintió que no hablaba solo a los gobiernos; hablaba de su propio escape de Sinaloa a Arizona, del dolor de atravesar fronteras con heridas que no se ven. Pocos días después, el Papa lanzó una crítica directa a quienes dicen defender la vida mientras avalan políticas que separan familias:
“Alguien que dice ‘Estoy contra el aborto’, pero está de acuerdo con el trato inhumano a inmigrantes… no sé si eso es ser pro-vida” (Reuters, 30 de septiembre de 2025).
La respuesta de Donald Trump fue inmediata: rechazó la acusación del papa como interferencia extranjera y defendió sus medidas migratorias como una obligación con sus electores. El debate volvió a colocar el tema moral de la migración en el centro de la política estadounidense.
FE COMPARTIDA EN DEFENSA DEL MIGRANTE
El papa Leo —el primer pontífice estadounidense de la historia, nacido en Chicago— instó a los obispos de su país a denunciar el crackdown migratorio, recordando que “la fe cristiana se mide por cómo tratamos al extranjero.”
En Estados Unidos, donde la comunidad cristiana evangélica protestante supera en número a la cristiana católica, también se han levantado voces fuertes que defienden la dignidad del migrante.
El teólogo Preston Sprinkle ha escrito:
“La Biblia innegablemente presenta la fe cristiana como una que acoge al extranjero. Nuestro trato hacia el migrante revela la autenticidad de nuestra fe.” (theologyintheraw.com)
Y el reverendo Joseph Yoo, pastor metodista en Houston, añadió:
“Nuestro prójimo no es quien más se parece a nosotros. Dios extiende amor hacia todos; somos nosotros quienes construimos las barreras.” (umc.org)
Cuando católicos y evangélicos protestantes coinciden en defender al migrante, el mensaje es claro: la fe auténtica no se usa para justificar exclusiones.

FRASES VIRALES Y CONTEXTO
En redes circula una frase atribuida al papa Leo XIV:
“No puedes seguir a Cristo y al mismo tiempo la crueldad de los reyes. Un líder que se burla de los débiles, se exalta a sí mismo y abusa de los inocentes no ha sido enviado por Dios”.
Hasta ahora no hay prueba de que la haya pronunciado. Aun así, su tono refleja el espíritu de un papa que no teme incomodar al poder.
UN ECO DESDE VENEZUELA
Al estar terminando este artículo, recibí la noticia de que María Corina Machado había sido galardonada con el Premio Nobel de la Paz 2025 por su defensa de la democracia en Venezuela. A lo largo de estos años, ha enviado palabras de ánimo y esperanza a los millones de venezolanos que se vieron obligados a dejar su país.
Su voz, dirigida tanto a quienes resisten dentro de Venezuela como a quienes luchan por reconstruir su vida en el exilio, recuerda que la libertad y la dignidad humana no conocen fronteras.

MÉXICO ANTE EL ESPEJO
México, como nación de origen, tránsito y destino, no puede limitarse a gestionar flujos migratorios. Debe asumir un liderazgo moral firme que proclame una verdad elemental: ningún ser humano es ilegal.
Pastores y sacerdotes en Guanajuato han levantado la voz y mostrado el corazón cristiano en tiempos de gran necesidad, por ejemplo cuando pasaban las caravanas de miles de migrantes huyendo de Centroamérica y Venezuela.
Necesitamos políticas que integren, no que contengan; que vean rostros, no cifras. Necesitamos más iglesias que abracen al migrante, sin cuestionar su origen ni sus documentos.
UNA PALABRA FINAL
Sofía sigue caminando con su hijo dormido. El papa Leo, un teólogo evangélico y un pastor metodista alzan su voz por ella. Y María Corina, reconocida por su valentía, nos inspira en esta era de fronteras y desarraigos.
En redes sociales circula, con un toque de humor, una frase que resume esta conversación pública:
“Si odias al papa porque es demasiado ‘liberal’, entonces vas a odiar de verdad a su jefe (Jesús).”
No es cita papal ni pastoral, es ingenio colectivo. Pero encierra una verdad sencilla: cuando la fe incomoda al poder, probablemente está cumpliendo su propósito. ¿Estás de acuerdo?
Esta columna de opinión fue publicada originalmente en El Sol de México

